Cómo saber y qué hacer si tu hijo está enfermo

Cuando somos padres, el peor momento por el que pasamos es cuando nuestros hijos se enferman, en especial los padres primerizos. ¿Cómo saber si debes llevarlo al médico? ¿Qué preguntas debes hacer? Afortunadamente, si dedicas un poco de tu tiempo a aprender cuáles son los signos de las posibles enfermedades que puede sufrir tu pequeño, sentirás mayor seguridad sobre cómo reaccionar.
Cuando llames al pediatra para explicarle tu preocupación, trata de ser lo más detallado posible. Es importante conocer los síntomas precisos que ha presentado tu hijo y desde hace cuánto tiempo han empezado, trata de no omitir ningún detalle. En ocasiones podemos utilizar la frase “no se comporta de forma normal” para describir los síntomas de nuestro pequeño, pero ¿Qué significa? Estas son algunas características que se pueden observar:

  • Tu hijo no sonríe ni juega como normalmente lo hace.
  • No puedes tranquilizarlo y no para de llorar.
  • No quiere separarse de ti.
  • Está somnoliento la mayor parte del día
    Adicional a esto, queremos dejarte una lista de síntomas que te ayudará a determinar cuándo observar y esperar y cuándo llamar al pediatra o acudir a emergencias.
    Fiebre: El niño tiene fiebre cuando su temperatura rectal supera los 38º C o si la axilar es mayor a los 37º C. No tomes la temperatura bucal en menores de 4 años. La temperatura del oído corresponde aproximadamente a la temperatura del recto si se toma correctamente en bebés mayores de 3 meses. El hecho de que haya fiebre significa que el niño está combatiendo una infección, pero no significa que tu bebé esté gravemente enfermo. La fiebre es parte del mecanismo de defensa del cuerpo contra las enfermedades leves comunes de la niñez.
    Vómito: El vómito es una expulsión forzada del contenido del estómago, generalmente, el vómito acompaña a enfermedades virales similares al resfriado o tipo gastroenteritis, o puede implicar que algún alimento “le ha sentado mal”, o tiene intolerancia al mismo. Una serie de vómitos frecuentes dura, por lo general, de 8 a 12 horas como máximo. Éste es un problema mayor en niños más pequeños, ya que se deshidratan con mayor rapidez. Los vómitos son graves y requieren atención médica inmediata si:
  • Tu bebé además “se ve enfermo”.
  • Es difícil despertar al niño o parece confundido cuando está despierto.
  • Los vómitos contienen sangre que no proviene de cortes en la boca o de una hemorragia nasal.
  • Los vómitos son de color amarillo claro o verde.
  • El abdomen de tu bebé está hinchado, y el niño parece tener dolor abdominal durante más de tres horas.
    Deshidratación: Tu bebé corre el riesgo de deshidratarse si:
  • Es incapaz de retener líquidos claros, incluso cuando se le dan pequeñas cantidades y a menudo.
  • Los vómitos están acompañados de deposiciones líquidas, más de 8-10 en 24 horas.
  • Rechaza beber cualquier líquido.
    Mantener a tu hijo lo más sano posible es una labor que realizas en conjunto con tu pediatra. Recuerda que todos los pediatras y profesionales de salud desean ayudar y nunca dudes en buscar su consejo o atención profesional cuando tengas alguna inquietud. Si tu pequeño tiene dolor o fiebre y no se acompaña de otros síntomas, puedes aliviarlo con Buprex Forte.
    Fuente:
  • https://www.dodot.es/bebe/crecimiento-y-desarrollo/articulo/como-saber-y-que-hacer-si-tu-bebe-esta-enfermo